martes, 5 de abril de 2011

Sanz volvió con todo.

Al bajarse de la interna, Ernesto no sólo resignó toda posibilidad de ser Presidente sino, mucho más importante, renunció a seguir utilizando el 'eslógan del milenio'. A pesar de todo, su inquieto ingenio no se toma descanso y nos regala este maravilloso juego de palabras.
Digno discípulo del Rabino.

2 comentarios:

Sergio De Piero dijo...

Ves y no te dejan votarlo!! porqué eh porqué?

Manfred Pichota dijo...

Un escándalo!