miércoles, 22 de junio de 2011

Más perversiones schoklenderianas.

Cada día que pasa son más las revelaciones que dan cuenta del grado de depravación al que llegaron los parricidas de centroizquierda. Hoy informa Perfil que habrían usado las instalaciones del Country Patacón como búnker para la confección de prendas femeninas -seguramente empleando mano de obra infantil y esclava- que ellos mismos utilizaban para dar paseos por los bosques del exclusivo refugio. Un escándalo.

2 comentarios:

Larabi dijo...

Impresionante las ramificaciones de las empresas de estos muchachos. Yo creo que además de chales hicieron bufandas, pero eso aún no estaría confirmado. Lo que si parece ser cierto que a los chicos de los talleres clandestinos nisiquiera les pagaban. Directamente los amenazaban de que si no trabajaban les iban a matar a sus padres.

Manfred Pichota dijo...

Gran amenaza, Larabi. Y a los pibes que no se asustaban los llevaban a una visita guiada a la hemeroteca de la Biblioteca Nacional. Al margen: el tema ´bufandas´ esta confirmadísimo.